CUBA.BORRELL CALIFICA DE "FRIVOLA E IMPROVISADA" LA NUEVA POLITICA HACIA CUBA
- Considera que el embajador Coderch "no ha sido muy diplomático"
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
El diputado y ex minisro José Borrell criticó hoy la nueva política del Gobierno español con Cuba, a la que calificó de "frívola e improvisada". En opinión de Borrell, esa política "no sirve para defender ni los intereses españoles en Cuba ni el proceso de democratización del regimen cubano ni las condiciones de vida de los cubanos".
Sobre la negativa cubana a conceder el placet al nombrado embajador de España en Cuba, José Coderch, Borrell opinó que "era de esperar una reacción del Gobierno cubano en este sentido" e hizo na velada crítica al embajador.
"Supongo", dijo Borrell, "que un diplomático tiene que ser diplomático y que debe comportarse de una forma acorde con las reglas del juego de la diplomacia y, posiblemente, en este caso no haya sido así".
Borrell, que se encontraba en Cuba cuando se produjo el cambio de rumbo de la política exterior española hacia la isla, manifestó hoy en el Congreso que tuvo ocasión de hablar con muchos empresarios, inversores españoles y directores de empresas radicadas en Cuba y su opinión era unánime", dijo: "Ese giro en la política de España hacia Cuba es un craso error que va a poner en serias dificultades a nuestras actividades económicas en la isla, va a debilitar nuestra posibilidad de acción hacia el futuro y va a dejar un vacío que será ocupado por otros países".
"Creo que ha sido una torpeza", continuó Borrell. "Se ha entrado en la política exterior con respecto a Cuba con la misma falta de tacto y con la misma impovisación con la que se ha entrado en el sistema definanciación autonómica o en la modificación del régimen fiscal. En las tres cosas se ha dado prueba de una frivolidad y una improvisación en la forma de proceder, sin tiro ni tiento, que, en este caso, no sirve para defender ni los intereses españoles en Cuba ni el proceso de democratización del regimen cubano ni las condiciones de vida de los cubanos".
En opinión de Borrell, "cualquier política hacia Cuba tendría que atender a esos tres objetivos: propiciar la democratización del régimen, mejorar la condiciones de vida de la población y abrir posibilidades de actuación a las empreas españolas en la isla, ahora y en el futuro. Y ese cambio de política, sin tiro ni tiento, no contribuye a ninguno de estos tres objetivos".
(SERVIMEDIA)
26 Nov 1996
J