CUATRO JOVENES SE CUELGAN DEL VIADUCTO DE MADRID PARA PROTESTAR POR LA GUERRA DE GOLFO
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Cuatro jóvenes, miembros de la Asociación Yuliana, se colgaron esta mañana del viaducto madrileño de la calle Segovia para protestar contra la guerra del Golfo Pérsico. Además, colocaron una pancarta de unos 16 metros de longitud con el lema "Estamos por la paz".
Ni los agentes del Cuerpo Nacional de Policía ni los funcionarios de la Policía Municipal de Madrid que acudieron al lugar, trataron de impedir la iniciativa de los jóvenes, que concluyó después del mediodía debido alintenso frío y al aire cortante que hacía en la capital de España en el momento en que desarrollaron la protesta, según explicaron ellos mismos a Servimedia.
A las 8,45 de la mañana, Julio de la Iglesia, fundador de la asociación, y otros tres muchachos, que no quisieron identificarse para no alarmar a las padres que desconocían su acción, lanzaron las cuerdas y se colgaron del puente, hasta que quedaron suspendidos a una altura de unos 25 metros.
Todos ellos, que manifestaron ser deportistas y tner cierta familiaridad en este clase de experiencias, utilizaron para colgarse material profesional de alpinismo y, cuando terminaron su protesta, descendieron hasta la carretera haciendo "rapel".
Varios miembros de la asociación aprovecharon el acontecimiento para repartir entre los viandantes folletos sobre los fines de Yuliana, mientras que sus compañeros sorportaban a duras penas las inclemencias del tiempo en las alturas.
MENOS MUERTOS
Julio de la Iglesia señaló a esta agencia que habían legido el viaducto para esta acción "porque es el puente más alto de Madrid y porque desde él se han arrojado muchas personas, que generalmente tenían pocos recursos económico y falta de apoyo institucional".
"Si se hubiese dedicado el dinero en ayudar a esa gente en lugar de emplearlo en hacer guerras, no hubiesen muerto", agregó.
La Asociación Yuliana, que empezó a funcionar en diciembre del pasado año, es una organización independiente y altruista cuya misión principal es realizar acciones en efensa de la naturaleza y los derechos humanos.
Está compuesta por unas 90 personas, estudiantes o jóvenes trabajadores, aunque también hay biólogos, médicos e, incluso, patrones de yates. No cuentan con ningún apoyo institucional, ya que sus responsables prefieren mantener la "independencia".
Hace unos días, se plantearon la idea de fletar un barco para ir a Chipre y desde allí viajar a Siria para prestar ayuda humanitaria a los damnificados por el conflicto bélico del Pérsico.
Sin embargo,rechazaron el proyecto porque los dirigentes de Cruz Roja Española les dijeron que ellos tenían ya cubiertas las necesidades de los refugiados en aquella zona.
(SERVIMEDIA)
09 Feb 1991