CSIF pedirá tres puntos de aumento de poder adquisitivo en 1992 ---------------------------------------------------------------
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El Gobierno seguirá negociando con los sindicatos de la función pública un plan de competitividad para la Administración, a pesar de la ruptura de las negociaciones relativas al sector privado de la economía.
Fuentes sindicales y del Ministerio para las Administraciones Públicas confirmaron a Servimedia que la negociación proseguirá, una vez estudiadas por parte del Gobierno las aternativas propuestas por los representantes de los trabajadores.
A este respecto, un portavoz del Ministerio para las Administraciones Públicas señaló que la reanudación de los contactos podría decidirse esta misma semana y recalcó que confían en que el resultado del pacto de competitividad no interfiera en el diálogo.
Por su parte, el secretario de Acción Sindical de la Federación de Servicios Públicos de UGT, José Murillo, manifestó a esta agencia que "la reforma de la Administración es una custión pendiente en todo momento: antes, después y dentro de cualquier pacto de competitividad".
Reconoció que el fracaso del pacto en el sector privado "crea un clima distinto, pero no puede saberse si será a favor o en contra, porque una situación de decepción como la que se vive ahora también podría producir una agilización de otro tipo de negociaciones".
Murillo indicó que, dentro de la plataforma que han presentado junto con CCOO a la Administración, los puntos clave son la garantía de un aumnto del poder adquisitivo de cinco a seis puntos entre 1992 y 1994 y la participación sindical en la oferta de empleo público, formación y salud laboral.
Otras cuestiones planteadas son la fijación de un salario mínimo, que podría estar en torno al 1.400.000 pesetas, y la reducción progresiva de la jornada laboral, desde las 37,5 horas actuales hasta 35.
CSIF: MANTENER LAS OPOSICIONES
Por su parte, el presidente de la CSI-CSIF, José Luis Alemany, adelantó a Servimedia que en la propuesta que ha remitido a la Administración reclaman un aumento de poder adquisitivo de tres puntos en 1992, dos puntos en el sueldo y uno en otros conceptos retributivos.
CSI-CSIF también defenderá el mantenimiento del sistema de oposiciones, aunque haciéndolas menos memorísticas, porque se ha mostrado como la mejor manera de garantizar los principios de objetividad, capacidad y mérito.
Sin embargo, la CSI-CSIF también defiende, como UGT y CCOO, la supresión del requisito de titulación para acceder a los Grups Superiores de la Administración. De esa manera, a su juicio, se reconocería el hecho de que "hay administrativos que saben de administración mucho más que abogados recién incorporados a la función pública".
En cuanto al personal, Alemany recalcó que, antes de pensar en aumentar el número de empleados públicos, es preciso distribuir lógicamente los efectivos existentes.
En su opinión, la Administración no ha creado suficiente empleo en los departamentos destinados al servicio de los ciudadanos, omo la Sanidad y la Justicia, y ha hecho mucho más hincapié en potenciar los organismos de control de los ciudadanos, como el Fisco.
(SERVIMEDIA)
23 Jul 1991
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