En la denuncia, la CSI-CSIF explica que el pasado viernes, 6 de septiembre, un grupo de funcionariospersonal agregado pertenecientes a CCOO y UGT, forzaron la puerta de entrada de la sede que la confederación tiene en el edificio del Tribunal Supremo y Audiencia Provincial de Madrid.

Según la denuncia, el responsable de la sección sindical, que realizaba gestiones fuera del edificio, encontró al grupo en el local y al preguntarles la razón de su acción, le respondieron que "ellos también tenían derecho a un local".

"Ignoramos si estas centrales han solicitado o gestionado local sindical en dico edificio, si bien, al parecer, tienen ya asignado uno, pero que no les gusta", aseguró Andrés Sanz.

El dirigente de la CSI señaló que los ocupantes habían utilizado una llave falsa y que arrancaron carteles de información. Además, inspeccionaron la documentación que el sindicato guardaba en el local.

No obstante, en la denuncia presentada ante el Juzgado de Instrucción de guardia, los responsables de la central sindical aseguran que "ignoramos si falta algún documento hasta el momento".

LaConfederación de Sindicatos Independientes asegura que la vigilante de seguridad y agentes de la Guardia Civil que estaban de servicio, fueron testigos de estos hechos, "pero no intervinieron por pensar que se trataban de miembros de esta central".

La central sindical solicita que se identifique a esos individuos y que las autoridades pertinentes dicten auto de procesamiento contra ellos.

La CSI-CSIF tiene asignado un despacho en el Tribunal Supremo desde principios de este mes, según informó el ropio Andrés Sanz.