"El ciclón fue un desastre de ingentes dimensiones y, ahora, los supervivientes se enfrentan a una gran catástrofe humanitaria", afirma esta ONG en un comunicado.

Según estimaciones, podría haber hasta dos millones de damnificados y los informes que maneja Cruz Roja indican que muchos de ellos no tienen refugio, ni acceso a alimentos y agua potable. Además, subraya la organización humanitaria, "incluso el acceso a la atención básica de salud es ínfimo".

Hasta el 14 de mayo, habían aterrizado en Yangón 16 aviones con suministros de socorro de la Cruz Roja y la Media Luna Roja y otros cinco están previstos para hoy. Al final del día, a través de esta línea de socorro habrán llegado al país 180 toneladas de ayuda de la Cruz Roja.

Desde la tormenta, un total de 21 delegados del personal internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja se han incorporado al equipo que prestaba servicios en Yangón y que actualmente apoya la labor de unos 27.000 voluntarios de la Cruz Roja de Myanmar.

Cruz Roja Española, por su parte, participa "activamente" en esta operación de la federación internacional, ya que ha enviado 30 toneladas de ayuda y 30.000 euros de su Fondo de Emergencias para apoyar a la Cruz Roja de Myanmar. Además tiene previstos más envíos de ayuda en los próximos días a la zona, a la que ha desplazado dos delegadas.