Partiendo del principio "prevenir es vivir", Cruz Roja recomienda a los automovilistas que no consuman alcohol ni otras sustancias adictivas si piensan ponerse al volante y, en el caso de estar medicado, tener en cuenta las especificaciones del medicamento.

También advierte de los riesgos que entraña la utilización del teléfono móvil mientras se conduce, práctica que, según la organización, multiplica por diez el riesgo de sufrir un accidente.

Otras de las recomendaciones básicas de Cruz Roja son la conveniencia de realizar paradas de descanso cada 2 horas o cada 200 kilómetros; utilizar el casco, en el caso de los motoristas; mantener la distancia de seguridad; utilizar sistemas de retención infantil para niños menores de 12 años o que no alcancen los 1,50 metros de estatura, y hacer uso, en todo caso, del cinturón de seguridad.