Suárez del Toro manifestó que "solamente una pequeña parte de la deuda, unos 6.000 millones de pesetas, se debe a la mala gestión de la anterior dirección de Cruz Roja", en referencia al mandato de Carmen Mestre.

Para el nuevo presidente, los hospitales son los causantes de casi toda la deuda, ya que durante los últimos 30 años estos centros han prestado asistencia provocando déficits, pero sin que pudieran ser cerrados, dbido al carácter benéfico de la organización no gubernamental.

Por este motivo, Suárez del Toro considera que la sociedad debe entender que esta medida se ha tomado por la "difícil situación económica que atraviesa Cruz Roja".

La organización humanitaria, según su presidente, con toda probabilidad obtendra del Gobierno un crédito hipotecario que permita superar la situación y zanjar sus deudas.

El presidente de Cruz Roja reconoció que los escándalos que han salpicado a Cruz Roja han mermado os ingresos de la organización, pero afirmó que "los servicios de Cruz Roja se siguen prestando de la misma manera que se estaban prestando hasta ahora y eso es lo que la población percibe".

Juan Manuel Suárez del Toro visitó Valencia para reunirse con los presidentes de diferentes asambleas locales de la organización y analizar conjuntamente la crisis abierta en la institución tras la dimisión de la antigua presidenta.

Asimismo, el presidente de Cruz Roja asistió a la entrega de varios ambulancis destinados a diferentes zonas de la provincia de Valencia.

Finalmente, Suárez del Toro hizo un llamamiento a la solidaridad y a la colaboración de los españoles con Ruanda a través de una cuenta corriente de emergencias internacionales que la organización tiene abierta en todas las entidades bancarias con el código 9292.