Los Presupuestos pasaron un primer exámen en el parlamento, previo acuerdo PSOE-CiU sobre las denominadas medidas de acompañamiento, que el portavoz catalán, Miquel Roca, calificó de "fundamentales" para apoya al Gobierno.

En una primera alocución, el ministro de Economía, Pedro Solbes, pidió a toda la sociedad que arrime el hombro y que asuma la dureza de los presupuestos.

No quiso ocultar la gravedad de la situación y reconoció que existe un escaso margen de maniobra: "Son los mejores para esta situación (los presupuestos). Es verdad que no estamos bien, pero tenemos perspectivas favorables".

Más tarde tomó la palabra el presidente del PP. Aznar puso `la guinda' y emplazó a Felipe González a llgar a un acuerdo nacional.

Este reto, pasaría, según la exposición de Aznar, por realizar en primer lugar una auditoría que clarifique la situación de las finanzas públicas, un mayor control público con la intención de reducir el déficit público sin tener que recurrir a nuevos aumentos de presión fiscal.

Asímismo, pidió reformar la tributación para favorece el empleo, el ahorro y las rentabilidad de la inversión, reformar el mercado laboral, privatizar empresas públicas y desregular los sectores. Unas "bases para el cambio de rumbo" demasiado abstractas, que escondían una intencionalidad puramente política: La presencia en la tribuna de oradores del presidente del Gobierno, Felipe González.

VOLVIO A SUBIR SOLBES

Pero fue el ministro de economía, Pedro Solbes quien volvió a subir a la tribuna de oradores, acompañado por los abucheos de los populares, en un gesto que Aznar interpretó como la negativa de González a llegar a este pacto presupuestario.

Más tarde, Solbes interpretaría laactitud del presidente del PP como un "farol" y Joaquín Almunia, portavoz socialista, acusaría a "los señores de la derecha" de buscar titulares en la prensa sin "dar la cara".

Pero Aznar insistió. Parecía que no quería pasar por desapercebido por el Congreso y lanzó otra `lanza envenenada' al acusar al Gobierno de querer beneficiar a 4.000 familias, de las más ricas de España, con la exención del Impuesto sobre Patrimonios.

Solbes explicó que esta medida concierne a todo el conjunto de pequeñosmedianos empresarios de los sectores industriales, servicios y agrarios, que a partir del uno de enero próximo no pagarán Impuesto sobre el Patrimonio por los bienes y derechos que constituyan su activo empresarial.

La polémica fue traspasada a los actores secundarios en los pasillos de la Cámara Baja: la denuncia en rueda de prensa por parte del portavoz popular, Rodrigo Rato, la réplica del secretario de Estado, Enrique Martínez Robles.

Aznar pidió modificar la tarifa del IRPF, la regulación d las empresas de trabajo temporal y el contrato de aprendizaje, la reforma del INEM y acusó al Gobierno de basar sus esperanzas para la reactivación económica en los comportamientos de los países comunitarios.

Las acusaciones del jefe de la oposición fueron excesivamente catastrofistas y la exposición de los errores de la política económica realizada hasta ahora, no fue la que peor sentó al Ejecutivo.

PAGAR LOS ERRORES

El apoyo de Convergencia i Unió a estos presupuestos han venido concretados n unos acuerdos que pasan por las medidas de exención fiscal a los pequeños y medianos empresarios.

Así, el portavoz catalán, Miquel Roca, cargado de alusiones a la esperanza y al esfuerzo, no desaprovechó la oportunidad para dejar caer algunas líneas de la política económica de CiU a la vez que proclamaba que "quedan otros campos en los que avanzar".

Roca, que recriminó al Gobierno haber cometido errores "que ahora tenemos que pagar", precisó, al igual que Sobes, que la primera intención con ests presupuestos es la creación de empleo fomentando la inversión.

De este modo sugirió la "urgente y necesaria" reforma del mercado laboral, realizar nuevas privatizaciones del sector público y, sobre todo, sustituir algún punto de la cotización de la Seguridad Social por un incremento del IVA.

Daba asi Roca un primer aviso al Gobierno, entre comentarios sobre estabilidad, realismo y asumiendo su complicidad en dichos presupuestos, de la intención, en cuanto a política económica se refiere, de losnacionalistas catalanes

Izquierda Unida no alteró su línea política al exponer por qué presentar enmiendas a la totalidad. El coordinador general de la coalición, Julio Anguita, criticó las exenciones fiscales propuestas por el Gobierno, el recorte de las pretaciones sociales y la "dejación" de la inversión pública en beneficio de la privada.

Anguita pidió retomar el Pacto Social con el que el Gobierno ha engañado a la sociedad por culpar del fracaso del acuerdo a los sindicatos.

"LOS NUMEROS MNDAN"

Pedro Solbes contestó con datos en la mano que "los números mandan" y dió una explicación de la política económica del Gobierno tan técnica que mereció una de las acusaciones que rompió la monotonía del debate: "Señor Solbes, es usted como un interventor".

Izquierda Unida se sumó al rechazo de los presupuestos, con la comprensión del PSOE, reflejada en el discurso del portavoz socialista, Joaquín Almunia.

No le falto razón al ministro de Economía al calificar este debate como el del "gan consenso parlamentario". Salvo los "retos" de Aznar y , CiU, CC, y PNV aceptó como "buenos" los presupuestos del Gobierno.

El Partido Nacionalista presentará sólo enmiendas a la totalidad por lo que su portavoz, Jon Zabaldía, denominó "el positivo cambio de la política autonómica del Gobierno", causa que no precisó el político vaso.

Advirtió que presentarían enmiendas a parciales en los temas puntuales y alabó los recortes de las prestaciones sociales realizados por el Gobierno.

Los temors del PNV se basaron, también, en la convocatoria de elecciones en el caso de devolver las Cuentas del Reino no rechazadas por ser "compatible" con lo que piensa el pueblo vaso. Pragamatismo y coherencia social fueron otras terminologías empleadas por Zabaldía para reforzar argumentos del Ejecutivo.

Otro aliado del PSOE es Coalición Canaria que, sin pretender dar "un cheque en blanco" al Gobierno, apostó por dar el visto bueno a los presupuestos por "la sensibilidad del Gobierno con Canarias, mayor enestos últimos dos meses, que en los últimos dos años", afirmó el portavoz de la coalición Lorenzo Olarte.

Una vez efectuada la votación, quedan ahora debatir los temas puntuales, donde además de las supuestas oposiciones de Partido Popular e Izquierda Unida, la única atracción pude presentarse en las enmiendas que presente el PNV, que podría ser compensado por rechazar la devolución al Gobierno del Proyecto de Ley de Prespuestos Generales del Estado para 1994.