CRONICA RESUMEN 1995. SANIDAD =============================

- El conflicto se cerró con un incremento salarial de 30.000 pesetas mensuales por facultativo, ligadas a objetivos asistenciales

- Los médicos pedían la equiparación salarial con los facultativos de las comunidades autónomas que mejor pagan, que suponía un aumento de 100.000 pesetas

- CCOO ha impugnado parte del acuerdo suscrito por la CESM y el Insalud

MADRID
SERVIMEDIA

(Por Elena Barrena)

Después de 48 días de huelga y casi 100.000 intervenciones uirúrgicas suspendidas, la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) aceptó un acuerdo que mantenía los 3.500 millones de pesetas ofrecidos desde el principio por la Administración y que suponía a cada médico un aumento salarial de 30.000 pesetas fijas mensuales, ligadas a objetivos asistenciales.

La CESM convocó el paro esgrimiento, entre otras reivindicaciones, un aumento de sueldo de 100.000 pesetas que les permitiera conseguir la equiparación salarial de los profesionales que ejercen en e Insalud con los que trabajan en otras comunidades autónomas.

El artífice de la rebaja en las pretensiones de los médicos huelguistas fue el ex vicepresidente del Gobierno Fernando Abril Martorell, un mediador 'pactado' por la CESM y la directora general del Insalud, Carmen Martínez Aguayo, que colaboró con él en la elaboración del informe sobre la situación de la Sanidad Pública, el conocido como 'Informe Abril Martorell'.

La CESM sólo conseguía que el Insalud asegurara un aumento de sueldo de 6000 pesetas para 1996 y se comprometía a conseguir para los próximos años recursos adicionales que se obtendrían de la mejora de la gestión hospitalaria, en la que participarían de forma activa los médicos.

El paro comenzó el 8 de mayo, casi un mes antes de que durante la IV Conferencia Sectorial de Sanidad del PSOE el presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, realizara su particular diagnóstico sobre las listas de espera en los hospitales, causadas, a su juicio, por los médcos.

La CESM amenazaba con colapsar los hospitales del Insalud 24 horas antes del comienzo de la huelga, a la que se sumaron días después los facultativos de Andalucía, Galicia y Valencia.

Para evitar problemas en sus centros hospitalarios, el Insalud ofreció a los pacientes la posibilidad de someterse a las intervenciones aplazadas por la huelga en clínicas privadas concertadas.

Sólo un 50 por ciento de estos enfermos, todos con patologías leves, aceptó acudir a las clínicas privadas, mientas el resto prefirió aguardar el final del conflicto.

BATALLA EN LOS MEDIOS

La batalla en los medios de comunicación de las partes en conflicto fue muy dura desde el inicio. Informaciones sobre el creciente número de operaciones suspendidas se mezclaban con amagos de encierros del comité de huelga, acusaciones de politización del conflicto y denuncias de sobresueldos pagados por PSN a dirigentes de la CESM.

El día 31 de mayo los negociadores llegaron a un principio de acuerdo, que la ministra d Sanidad, Angeles Amador, tuvo que bloquear por el veto realizado por el Ministerio de Economía y Hacienda, que temía que otros cuerpos de funcionarios buscaran la equiparación salarial con los funcionarios de las comunidades autónomas.

Otra fecha clave en el conflicto fue la del 21 de junio, en la que ambas partes acuerdan la mediación de Fernando Abril Martorell. Un mes y un día más tarde se firmó el acuerdo que ha costado muy caro a la CESM, según se comenta en medios médicos.

LA INSTANTANEA DE L HUELGA

Por extraño que parezca, la imagen de esta huelga que perdurará no será la de las salas y pasillos de los hospitales repletos de pacientes, sino la de Vicente Garcés fotografiado cigarrillo en mano durante una concentración ante el Insalud con el pelo engominado y un traje de chaqueta impecable, a juego con las 'ray-ban' y el 'rolex' de oro.

Animados por detalles como éste, las organizaciones de consumidores y de vecinos se colocaron frente a los médicos huelguistas y solicitaron al Defenor del Pueblo su inmediata intervención en el conflicto. También encontraron la oposición del resto de los sindicatos representados en la mesa sectorial de sanidad.

CCOO acaba de impugnar parcialmente el acuerdo suscrito por la CESM y el Insalud, al considerar que las mesas técnicas y las comisiones mixtas creadas tras el acuerdo invaden competencias de los organismos de negociación colectiva ya establecidos.

Otras voces críticas llegaron incluso desde dentro del propio colectivo médico, como la el ex presidente de la Comisión Deontológica de la Organización Médica Colegial y uno de los mayores expertos en ética médica de Europa, el doctor Gonzalo Herranz.

Herranz criticó el trasfondo ético del paro y aseguró a esta agencia que los médicos, como los curas, jamás deberían hacer huelga, porque causa "molestias y perjuicios" que son incompatibles con el primer principio ético del médico, que es no dañar.

(SERVIMEDIA)
17 Dic 1995
EBJ