A juicio dl sector que encabeza Agustín Moreno, la retórica ha sido hasta ahora la única respuesta del sindicato a las agresiones que ya se han realizado o que el Gobierno tiene previsto aplicar. Para este sector de CCOO, la asamblea de delegados contra las privatizaciones del pasado día 10, aunque fue un éxito, "no es suficiente para evitar el expolio del Estado".

Para el sector crítico de CCOO, es un "error" convocar movilizaciones concretas cuando la agresión social es general. Por ello, cree que la única maera de parar el ataque generalizado del Gobierno es la movilización amplia y sostenida, apoyada en una amplia política de alianzas con todas las fuerzas progresistas.

En un comunicado difundido hoy, el sector que apoya a Moreno denuncia "los piropos recíprocos entre el Gobierno y CCOO" y asegura que "si un Gobierno de derechas da un sobresaliente a los dirigentes sindicales, estos corren el riesgo de que los trabajadores les suspendan".

Los críticos denuncian también la situación de división intena en CCOO y critican la "agresividad que Gutiérrez adopta con aquellos militantes de su propio sindicato que tienen el atrevimiento de pensar y opinar con criterio propio". Para el sector crítico, toda estos factores provocan el desprestigio de CCOO y debilitan al sindicato.