En declaraciones a Servimedia, García de Andoain aseguró que él no tiene "claro" que "se vaya a cambiar la filosofía de despenalización" que impregna la actual legislación sobre el aborto en España, para llegar a considerar "el aborto como un bien moral".

Desde el punto de vista cristiano, aclaró, "el aborto no es un bien moral y no se puede concebir como un derecho", sino que ante el problema de los embarazos no deseados "hay que trabajar mucho en la prevención".

Para el coordinador de los cristianos del PSOE, el Congreso de los socialistas no acordó que "se vaya a avanzar hacia una ley de plazos", pues en la ponencia, aprobada este fin de semana por los delegados, "sólo" se especifica que se tomarán como referencia las leyes de plazos europeas, pero no se afirma que se vayan a adherir a la legislación española.

Sobre este asunto, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció ayer, en la rueda de prensa tras la reunión de la nueva Ejecutiva socialista, que las resoluciones tomadas en el Congreso del PSOE para avanzar en materia de aborto, laicidad y "derecho a una muerte digna", se llevarán a cabo en esta legislatura.

"MUERTE DIGNA"

García de Andoain señaló que entre los cristianos del PSOE existe un "grado de identificación importante con las resoluciones a las que se ha llegado en el congreso" como la que defiende "el derecho a una muerte digna".

A su juicio, estas conclusiones "no hablan de eutanasia", sino del derecho a morir dignamente, algo que no supone "ninguna colisión con lo que la moral oficial de la iglesia católica".

En este sentido, García de Andoain explicó que hoy existen centros regentados por religiosos con unidades de "cuidados paliativos del dolor" donde "se procura" que los pacientes tengan "una muerte con serenidad espiritual y física, para ayudarlos a vivir ese momento final de la vida en unas condiciones dignas".

El coordinador de los cristianos socialistas calificó como una "reflexión muy madura", la resolución del Congreso sobre laicidad, ya que la asocia a la democracia.

En este sentido, "la llamada más importante a la Iglesia" "quizás" radica en la necesidad de aclarar que "las leyes se aprueban" en el Parlamento "desde una moral pública", no únicamente religiosa, y que "una vez aprobadas tienen que ser cumplidas", explicó.

Para "avanzar en igualdad de trato", añadió, es importante que se "retiren" los símbolos religiosos, como los crucifijos, de ceremonias como la jura de cargos de los miembros del Gobierno, ya que estos signos "no representan al conjunto de la ciudadanía" y para los que no son creyentes "no significan nada".

En cuanto a la supresión de los funerales de Estado, el coordinador del grupo de cristianos socialistas aclaró que el Congreso, estableció un "planteamiento progresivo", según el cual "no se afirma que vayan a desaparecer, sino que se abre la puerta a que también puedan celebrarse ritos con una liturgia cívica".