El director general de la ONCE auguró que, para esta institución, los próximos cuatro años serán "difíciles y duros", por ese contexto económico, aunque se mostró confiado en que se superarán las dificultades. A su juicio, el primer reto que debe afrontar la ONCE tras sus últimas elecciones internas es conseguirque su participación en el mercado del juego tenga un desenvolvimiento razonable.

El responsable de la ONCE aseguró que la receptividad del Gobierno del PP con su institución es "muy grande" y subrayó que hay "mucha accesibilidad" por parte de los ministros del Gabinete de Aznar, aunque precisó también que la relación con los anteriores gobiernos socialistas fue "buena".

En materia de servicios sociales, el director general de la ONCE apuntó como prioridad el empleo, en un momento en el que el pao de las personas con discapacidades es muy superior al del resto de desempleados.

Servando Sánchez reiteró el compromiso de la Fundación ONCE de crear 5.000 puestos de trabajo en los próximos cuatro años. "Es un reto difícil, pero estamos dispuestos a trabajar en esa dirección", dijo.

Para los próximos cuatros años, la ONCE prevé invertir entre 1.600 y 2.000 millones anuales en programas de inversión y formación tecnológica dirigidos a lograr la estabilidad en el empleo de los afiliados y adecua sus necesidades a las nuevas tecnologías.

Servando Sánchez presidió en Sevilla la toma de posesión de Félix Hernández que continuará como delegado de la ONCE en Andalucía en los cuatro años siguientes y de Francisco Galván como subdelegado.