A finales de esta semana, la Delegación el Gobierno habrá cerrado cautelarmente durante tres meses un total de 19 establecimientos de recreo de la capital, donde la policía ha comprobado la existencia de tráfico y consumo de sustancias estupefacientes, como hachís, cocaína y heroína.

Los propietarios de los bares y discotecas sancionados se han defendido diciendo qu para ellos es muy difícil controlar el consumo de drogas en sus locales, argumento que es rechazado por Crespo.

"Si en inspecciones esporádicas a este tipo de establecimientos los agentes han podido constatar que se traficaba o consumía droga, los dueños, que están allí permanentemente, tienen más motivos para saberlo. Por lo tanto, existiría una cierta connivencia por no haber tomado medidas oportunas para evitar esos comportamientos", indicó el delegado.

Tras cumplimentar el expendiente sancioador, la Delegación del Gobierno notificará a los propietarios que su local será cerrado, aunque les dejará un mrgen de tiempo para que puedan sacar los objetos perecederos que puedan tener allí.

Estas intervenciones se han producido como consecuencia de la aplicación de la Ley de Protección de la Seguridad Ciudadana, conocida popularmente como "ley Corcuera", que recoge como infracción grave el tráfico o consumo de drogas en establecimientos públicos.