El informe indica que los costes directos del consumo de tabaco se elevan a 136.534 millones de pesetas, desglosados de la siguiente manera: 27.931 millones en asistencia ambulatoria, 25.339 millones en asistencia hospitalaria, 10.290 millons en productos farmacéutico, 72.701 millones en producción de tabaco y 273 millones en pérdidas provocadas por incendios y otros siniestros.

Entre los costes indirectos, el estudio recoge las pérdidas de producción como consecuencia del absentismo laboral, que asciende a 60.384 millones de pesetas, y la pérdida de potencial productivo como consecuencia de las muertes prematuras, que se eleva a unos 68.139 millones.

El informe señala que entre 2 y 2,5 millones de muertes prematuras anuales en el mndo son atribuibles al tabaco, incluyendo un tercio de muertes por cáncer, el 65 por ciento de las causados por bronquitis crónicas y enfisemas y el 25 por ciento de las originadas por cardiopatías coronarias.

En España, el número de muertes imputables al tabaco se estima en cerca de 40.000, es decir, el 13 por ciento del total de fallecimientos.

LEGALIZAR LAS DROGAS

El estudio indica que merece la pena considerar la posibilidad de legalizar la producción y consumo de todas las sustancias estupfaciones, bajo el control directo del Ministerio de Sanidad.

Entre las condiciones de esta opción, que el propio informe califica de "políticamente inviable", destaca la ausencia de todo tipo de publicidad, una información veraz y amplia sobre los efectos del consumo y la potenciación de los centros de deshabituación para quienes deseen dejar la droga.

El informe dice que el suministro y el consumo estarían restringidos solamente a menores de edad y a personas que pudieran producir perjuicios a trceros. Además, las sustancias se venderían a precio de coste.