Cospedal hizo estas manifestaciones en el discurso que dirigió a puerta cerrada a la Junta Directiva Nacional del PP, que se reunión esta mañana en un hotel de Madrid.

A esta cita asistieron prácticamente todas las cabezas visibles del PP. Camps fue el más destacado ausente. El presidente valenciano prefirió quedarse en su comunidad para reunirse con empresarios.

La secretaria general el PP insistió en que el partido defenderá la presunción de inocencia de todos sus dirigentes y manifestó su fe en la actuación de la justicia.

Ya en una intervención que pudo ser seguida por los periodistas, el presidente del PP, Mariano Rajoy, aseguró también que piensa defender la "honorabilidad" de todos sus dirigentes, mientras no se demuestre que han incurrido en alguna irregularidad.

El líder del PP se refirió a este asunto justo después de hacer un análisis optimista sobre los resultados de las elecciones autonómicas del 1 de marzo, y antes de arremeter contra el Gobierno por su falta de iniciativa política para afrontar la crisis.

Como viene diciendo desde que estalló el escándalo, Rajoy insistió en que el PP "no se ha financiado ilegalmente, ni ha recibido ni un euro de ninguna de las personas que han sido detenidas".

En todo caso, aseguró que desde el PP "actuaremos con prudencia y serenidad", porque "no somos inquisidores y defendemos la presunción de inocencia".

Afirmó que el PP no va a hacer "campaña contra nadie, pero vamos a defender la honorabilidad de nuestros militantes", que serán tratados "como inocentes hasta que no se demuestre lo contrario", y en caso de que hubiera pruebas en contra de alguno de ellos "actuaremos en consecuencia", sentenció antes de advertir que "todo esto no nos va a distraer del ejercicio de la labor de oposición".