Votaron n total de 349 de los 350 diputados elegidos en las pasadas elecciones. De ellos, 202 respaldaron al socialista Manuel Marín, es decir, los de su grupo y los de toda la oposición, excepto el PP, que ya había anunciado el voto en blanco de sus 148 diputados por falta de acuerdo con los soclalistas.

De hecho, 142 diputados votaron en blanco y hubo 3 nulos. Además, dos papeletas llevaban irónicamente escrito el nombre del secretario de Organización del PSOE, José Blanco.

Todos los diputados elegidosen los comicios del pasado 14 de marzo fueron llamados a votar, uno a uno y por su nombre en orden alfabético, por las diputadas más jóvenes del Congreso y componentes por ello de la Mesa de edad, las socialistas Isabel Fuentes y Leire Pajín.

Mientras, el diputado con más edad, el popular Feliciano Blázquez, recogía desde el escaño de la Presidencia las papeletas y las introducía en la urna.

Desde poco después de las nueve de la mañana llegaban al Palacio de la Carrera de San Jerónimo los diputads y diputadas electos, mientras un férreo control de seguridad mantenía cerrada la zona al tráfico y comprobaba los datos de todo el que se acercaba al Congreso.

Al filo de las diez menos cuarto llegaba el secretario general del PSOE y futuro presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y poco después lo hacía el secretario general del PP, Mariano Rajoy, cada uno por una puerta del patio que separa los dos edificios de la Cámara.

Los diputados fueron ocupando sus escaños habituales, en l caso de los que repetían, mientras los nuevos buscaban un hueco que ocupar. La nueva dirección del Grupo Socialista copó la primera fila de asientos del PSOE a partir del reservado a Rodríguez Zapatero.

Los ministros en funciones del Gobierno del PP ocupaban los bancos azules de la primera fila, con la notable ausencia del presidente, José María Aznar, al que muchos esperaban ver en esta sesión, aunque ya no es diputado.

Mientras todo esto sucedía, el ya presidente del Congreso, Manuel Marín, oupaba un escaño en la primera fila de los bancos socialistas, justo detrás del ministro de Hacienda en funciones, Cirstóbal Montoro.

Por su parte, su antecesora en el cargo, Luisa Fernanda Rudi, ocupaba uno de los escaños de las filas populares, sentada junto al también diputado y ex coordinador de Comunicación del PP Rafael Hernando.

Con el Hemiciclo prácticamente lleno, el diputado de más edad, el popular Feliciano Blázquez, pidió un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas de los atentads del 11 de marzo, guardado por todos los diputados electos puestos en pie.

Procedió después a leer el artículo 2 del Reglamento del Congreso, que establece el funcionamiento de la Cámara en su sesión constitutiva. Después, las dos diputadas más jóvenes, las socialistas Leire Pajín y María Isabel Fuentes, leyeron el decreto de disolución de las Cortes de la pasada legislatura y, uno a uno, los nombres de los electos en los comicios del 14 de marzo.

Después de este trámite comenzó la votación parala Presidencia de la Cámara, y todos los diputados fueron desfilando por la tribuna para dejar su papeleta en la urna. Leire Pajín recibió mientras llamaba a votar los saludos cariñosos de algunos compañeros, entre ellos Rodríguez Zapatero, y también un afectuoso abrazo del ministro de Defensa en funciones, Federico Trillo.