A su juicio, hay que diferenciar el suceso de ayer de la violencia de los grupos organizados que todos los domingos acuden a los estadios con bengalas y que protagonizan actos violentos.

"Lo de ayer, según parece, es la actitud de un par de ciudadanos, absolutamente irresponsables, que entran por una puerta donde habitualmente no están estos grupos y que, por tanto, no se controlan", indicó. "Es imposible controlar a cuatrocientas mil personas sin qe se escape nadie con un artefacto de esta naturaleza".

"Esta actitud es de una irresponsabilidad de tal calibre que yo creo que no tiene nombre", agregó el director general. "Simplemente hay que decir que es la de un individuo o dos individuos, de una edad ya madura, que se apartan de lo que es el comportamiento normal. Son hechos aislados muy difíciles de controlar".

Según Cortés Elvira, la Ley del Deporte "intenta que los clubes se conciencien de la existencia de determinadas cosas que son muynegativas para el mundo del fútbol. Creo que un acto como este aleja más a los espectadores que cualquier otro (...) La violencia es un fenómeno que, al final, acaba matando lo que es el espectáculo deportivo".

A su juicio, a partir de ahora serán muchos los padres que se planteen ir a los estadios con sus hijos, porque se acordarán de lo ocurrido en Sarriá.

"La ley es muy taxativa y ordena a los clubes poner los medios necesarios para que esto se impida. De no ser así, pueden ser sancionados a tavés de un expediente gubernativo", recordó el director general.

La Ley del Deporte establece textualmente en uno de sus artículos: "Queda prohibida la introducción de bengalas o fuegos de artificio, impidiéndose la entrada a todas aquellas personas que intenten introducir tales objetos".

Por lo que se refiere a la Comisión Nacional Antiviolencia, prevista en la Ley del Deporte, Rafael Cortés Elvira indicó que tiene que constituirse antes del 13 de abril y afirmó que espera que sirva para que tods los clubes se preocupen de lo que ocurre en sus estadios.