En una entrevista en "El País" recogida por Servimedia, la ministra señala que "las viviendas iniciadas cubren las demandas de nuevos hogares; eso da una idea de hasta qué punto estaba sobredimensionada la construcción".

La demanda anual de pisos está entre 350.000 y 400.000, estima la titular de Vivienda, quien agrega que el sector inmobiliario "debe responder como cualquier otro mercado a la ley de la oferta y la demanda".

"Si la demanda es de 400.000 nuevos hogares, no tiene sentido que se creen más", dice Corredor, quien considera que una vez superada la actual coyuntura de "transición", el mercado se va a "equilibrar".

Sobre la responsabilidad de los promotores y las entidades financieras en la "burbuja inmobiliaria", la ministra subraya que "tomaron sus decisiones de acuerdo con una coyuntura determinada. Ellos deberán, ya lo están haciendo, revisar su actitud de los últimos años".

Respecto al papel del Gobierno, la titular de Vivienda indica que "no se le puede acusar de pasividad", y defiende que "respeta la libertad de mercado" y "no puede interferir en las decisiones empresariales".

Corredor también habla de la evolución de los precios de los pisos, y apunta que todas las estadísticas coinciden en "una moderación, lo que no quiere decir un desplome", algo que sí sería "una mala noticia para los propietarios".

La ministra considera "relativo" que el sector inmobiliario esté "fatal", como dicen algunos, porque los precios y el euríbor se moderan y se construye más VPO que "nunca".