Corcuera acusó al periodista de faltar a la verdad y de ser un "gran manipulador", mientras que Ramírez arremeti contra el ministro, a quien censuró por hacer "algo tan miserable" como utilizar su ministerio para desprestigiarle a él y a su periódico.

Para el director de "El Mundo", el responsable del departamento de Interior llamó el pasado jueves a la tertulia de "Protagonistas" "buscando pelearse conmigo" y utilizando como pretexto las informaciones del periódico sobre la asistencia a la manifestación en favor de la liberación de Julio Iglesias y a la convocada posteriormente por HB.

Por su parte, Corcura insistió en que la manifestación en favor de la liberación del industrial fue "esplendorosa" y mucho más numerosa de la promovida por los que "defienden o preconizan la violencia".

Asimismo, el ministro reiteró que el motivo de su llamada a la emisora fue destacar que todos los medios de comunicación, a excepción del diario "Egin", coincidieron en señalar que la primera convocatoria fue más numerosa que la de la coalición "abertzale".

"A usted", dijo Corcuera a Ramírez, "no le gusta que yo hay empleado la frase 'correr a gorrazos' y deduce de esa expresión que lo que yo preconizo es la confrontación civil y usted se equivoca. Esa expresión la he utilizado en no menos de cuatro ocasiones y jamás ha ocurrido nada, nadie ha dicho nada, porque en Euskadi expresiones de esa naturaleza se aplican incluso cuando se va a jugar un partido de fútbol".

El periodista criticó al ministro por hacer una política muy diferente en lo que dice "de puertas afuera y en lo que luego en realidad hace". En este entido, apuntó que emisarios del Ministerio del Interior mantienen reuniones con los violentos para plantear la posibilidad de reanudar el diálogo político.

DOBLE RASERO

"Lo que yo le reprocho", añadió Ramírez, "es que usted mantenga este doble rasero: que intente echarme a la opinión pública encima en un asunto en el que, lógicamente, la gente siempre va a defender posiciones de autoridad, porque yo no acepte comportarme como un halcón en este asunto, cuando luego, detrás de toda esa retórica, su popia política es mucho más blanda y está llena de gestos que, eso sí, nunca agradecerán suficientemente los violentos".

Frente a estas acusaciones, el ministro desmintió el envio de emisarios a negociar con ETA, al tiempo que retó al director de "El Mundo" que dijese públicamente quiénes son esos supuestos mensajeros.

La polémica entre ambos invitados traspasó el ámbito del problema del terrorismo para trasladarse al terrreno de la política, en concreto a la situación interna que atraviesa el PSO.

Ramírez puso de relieve que Corcuera tiene una gran ambición política y vaticinó que abandonará muy pronto el Ministerio del Interior, extremos que fueron rechazados por el ministro.

En concreto, el director de "El Mundo" dijo que Corcuera pretende ser vicesecretario general del PSOE y secretario de Organización el partido, y "está haciendo todo el día de celestino entre el sector guerrista y el renovador".

Asimismo, subrayó que Corcuera se está dedicando mucho más al Partido Socialista qu a su departamento y pretende jugar un papel con vistas a la celebración del próximo congreso del partido.

CONSTRUIR LA PEANA

"Pero no se construya la peana", dijo el periodista a Corcuera, "a costa de mi prestigio y a costa del diario 'El Mundo'. Usted dice que soy un manipulador absoluto, ¿soy también un manipulador absoluto con relación al 'caso Filesa', Ibercorp o Macosa?".

Ramírez fue contundente en sus afirmaciones al responsabilizar al ministro de hacer "algo miserable" como utilizar su argo y el consenso existente en apoyo de la política antiterrorista para tratar de desprestigiar con fines políticos a un periodista independiente y a un medio de comunicación crítico.

En otro momento del debate, el responsable de la cartera de Interior se mostró orgulloso de ser electricista y de "haber llegado muy alto en política", al tiempo que destacó que durante sus cinco años en el ministerio "las cosas no están peor que antes".

"Tal es así", indicó, "que cuando hay una campaña electoral m partido me enseña por el país y soy consciente de que tengo un prestigio en mi país, que usted (Ramírez) me lo quiere arruinar. Y me parece lógico porque esa facultad se la doy a usted como periodista. Critíqueme, pero una cosa es criticar y otra cosa es la línea editorial de su periódico".

Corcuera, que confesó leer todos los días los diarios "Egin" y "El Mundo", negó que proteja a nadie en asuntos como el de Macosa y se dirigió al periodista en unos términos muy duros:

"¿Por que trata de complcarme con Macosa? ¿Cuál es su última intención? ... Es usted un gran manipulador... El ministro del Interior tiene, a veces, igual que el común denominador de los ciudadanos, la desgracia de que alguna de sus amistades no actúen correctamente. Pero, a diferencia de otros, cuando no actúan correctamente están en los juzgados. No tengo nada que decir a partir de ahí".

"Si usted quiere decir que vivo mejor de lo que se correspondería con mi sueldo, si conoce de algún negocio extraño que yo tenga, si conoe de algún negocio de mi familia -me consta que he sido investigado- si hay algo sucio en mi comportamiento, dígalo usted y si no lo hay, ni tan siquiera lo insinúe", concluyó.