El parlamentario regional explicó que su presncia en la original competición es un gesto simbólico de apoyo a los organizadores del evento, a los cultivadores y a los consumidores de marihuana.

Indicó que siente curiosidad por "saber en qué consiste la I Copa de la Marihuana de Madrid", aunque explicó que no puede ir como concursante porque él no planta "maría". "Me planto, pero no planto", bromeó.

A su juicio, se trata de una experiencia "novedosa y bastante curiosa" porque "hay que intentar dar una imagen más normalizada de todo lo que tine que ver con la marihuana. Yo creo que los productos del cáñamo deberían tener algún tipo de regulación que les quitara esa visión treméndista que se tiene de ellos".

El parlamentario de IU insistió en que acudirá al acto a título personal y no en nombre de su coalición ni cómo diputado regional. "Que quede claro que no me manda el grupo parlamentario en calidad de diputado", puntualizó.

NO A LA REPRESION

Paíno recordó que en alguna ocasión ha intervenido en la Comisión de Juventud de la Asamlea de Madrid y que el planteamiento de su grupo parlamentario es y ha sido siempre que "el problema de las drogas aquí, en toda Europa occidental y en todo el mundo, es un problema que requiere una solución que no pasa por la represión".

"Estados Unidos, el primer productor de marihuana del mundo, tiene una de las legislaciones más duras y represivas con el consumo de drogas y no sólo no ha conseguido erradicar el consumo sino que, además, cada vez se consumen drogas más peligrosas", insistió el dipuado de IU.

A su modo de ver, la marihuana y todas las drogas relacionadas con el cáñamo requieren un tratamiento distinto por parte de las autoridades a lo que puede ser el problema de la cocaína y de la heroína, porque "ni tienen los mismos efectos, ni producen enfermedades, ni se adquiere dependencia", concluyó.