Según informó el Estado Mayor de la Defensa (EMAD), esta actividad comenzó gracias a un grupo de voluntarios del contingente español, tanto de Bamako como de Koulikoro. Su inicio tuvo lugar en el mes de junio aprovechando que el curso escolar estaba finalizando.

De esta forma, los voluntarios pudieron aplicar los métodos y procedimientos de enseñanza adquiridos a través de uno de los lectores de la Universidad de Bamako, que tenía estrecha relación con la embajada española.

Los métodos de enseñanza se tradujeron en sesiones teóricas y prácticas impartidas por el lector para que los voluntarios españoles pudiesen aplicarlos posteriormente en sus clases, de una forma sencilla y comprensible para el alumnado al que se dirigirían posteriormente.

De esta forma, los militares españoles decidieron poner en marcha el proyecto, similar al Programa Cervantes de Líbano, y comenzar a dar clases en el centro Anne Coulibaly de Koulikoro y el Colegio María Inmaculada de la capital, Bamako.