Con las series del Instituto Nacional de Estadística, y suprimiendo los factores estacionales, los dos primeros trimestres del pasado año fueron de caída, el tercero frenó esta evolución, igualándose al segundo, pra experimentar una inesperada disminución del 2,7 por cien en el cuarto trimestre, periodo durante el que el Gobierno ha ampliado sus optimistas expectativas.

Las mismas fuentes que han elaborado esta información señalan que la caída del cuarto trimestre supondría, en tasa anual una reducción del 10,3 por cien en el consumo privado, lo que se califica como una disminución "bestial" del consumo.

Siguiendo la serie original de la Encuesta de Presupuestos Familiares, la evolución a lo largo de 1993en el consumo fue la siguiente: primer trimestre, caída del -0,5 por cie, segundo trimestre, nueva caída del -0,9 por cien, tercer trimestre, elevación del 0,6 por cien, y cuarto trimestre, caída del -4,8 por cien.

A favor de estas impresiones pesimistas, que contrastan con el optimismo del gobierno, juega los datos más recientes sobre ventas en grandes almacenes, pero, sobre todo, la nueva caída en enero del Indice de Confianza del Consumidor de nuestro país que elabora la CE para todos los países y ue posteriormente hace público el Ministerio de Economía.