Según datos de la Asociación Española de Codificación Comercial (Aecoc), que celebrará los días 28 y 29 de mayo en Vigo su décimo Congreso de Productos del Mar, se trata de una evolución similar a la experimentada por las frutas frescas (-0,55%), mejor que la del pan (-5%) pero algo peor que la de la carne (+0,5%).

Aún así, los españoles son "grandes consumidores" de productos procedentes del mar, con un consumo medio de 27,60 kg anuales 'per capita' y un quinto puesto en el ránking mundial (tan sólo por detrás de Islandia, Japón, Portugal y Noruega).

De hecho, en España el 4,2% de la cesta de la compra de alimentación la ocupan pescados y mariscos.

Según el estudio de Aecoc "El comprador de productos del mar", las comunidades más consumidoras de este tipo de productos son Cantabria (cada persona consume al año una media de 40 kg anuales), Castilla y León (36,5 kg), Asturias (34,3 kg) y Galicia (32,7 kg).

Los productos del mar están muy presentes en los hogares pero aún tienen un importante potencial de desarrollo en la restauración. Concretamente el 77% de estos productos se consume en el hogar y sólo un 23% en el canal de hostelería y restauración.

En cuanto al lugar de compra, el citado estudio indica que los españoles prefieren la tienda especializada (es decir la pescadería tradicional o el mercado) para adquirir estos productos; si bien han perdido peso en los últimos años en favor, sobre todo, del supermercado. Así, en tan sólo cuatro años el canal tradicional ha pasado de capitalizar el 64% de las ventas al 46%.

La razón principal por la que los españoles compran productos del mar es porque los consideran saludables (54%); un 13% afirma adquirirlos porque le gustan a toda la familia; un 11% por costumbre o tradición; y sólo un 3% por su precio.