La Comisión Europea y las autoridades competentes de cada Estado miembro podrían, a partir de ahora, prohibir los productos peligrosos e imponer su retirada del mercado comunitario, según han declarado portavoces de la BEUC.

La oficina asegura, además, que la nueva norma traerá muchas ventajas para el consumidor europeo, ya que al disponer las autoridades de los medios legales necesarios para obligar a los productores a divulgar informaciones sobe productos peligrosos conocidos, y detectar estos productos con el fin de retirarlos a tiempo del mercado, los consumidores tendrán acceso a dichas informaciones.

Por otro lado, la Comisión Europea podrá introducir una prohibición de urgencia para aquellos artículos sospechos de conllevar ciertos riesgos durante un período de 1 año, mientras que hasta ahora la duración de esta precaución era de tan sólo 3 meses.

Todos los productos y servicios de consumo estarán cubiertos por la nueva legislació modificada, incluso ámbitos como los servicios hoteleros y los ofrecidos por peluquerías y salones de belleza, por ejemplo.

El BEUC considera que la Comisión ha logrado así simplificar los procedimientos de urgencia para vetar o retirar del mercado artículos considerados de riesgo para el consumo y, además, introduce mayor transparencia y una vigilancia más férrea.