La Asociación para la Defensa de la Naturaleza (Adena), el Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (Fapas) y el Colectivo Ecologista Palentino mantienen que en la zona donde la Administración pretene construir el embalse de Vidrieros habitan 20 ejemplares de oso pardo.

Según Adena, el embalse destruiría su hábitat osero y establecería una barrera artificial en un "área de trasiego continuo de osas con crías".

Por su parte, la Coordinadora de Organizaciones de Defensa Ambiental (Coda), que agrupa a más de 160 organizaciones ecologistas de todo el Estado, ha denunciado que las obras de la carretera y el túnel del valle de Aspe están generando un grave impacto ambiental sobre el Parque Naciona de los Pirineos Franceses, "donde habitan los últimos osos de esta cordillera".

La Coda asegura que la construcción también afectará al ecosistema español, ya que la nueva carretera contactaría con el túnel de Somport.

Por ello, los ecologistas han solicitado a los gobiernos de España y Francia que paralicen las obras y atiendan las reivindicaciones de los grupos conservacionistas.