Los quince vocales del Consejo General, todos ellos pertenecientes al grupo Unidad Progresista, han decidido la continuidad de su cúpula directiva, integrada por José María Arroyo (presidente), Mario Loreto San Robles (vicepresidente primero), Rafael de Lorenzo (vicepresidente segundo y vicepresidente ejecutivo de la Fundación ONCE), Enrique Servando Sánchez González (director eneral) y Juan Carlos López Cid-Fuentes (vicepresidente primero ejecutivo y consejero delegado de la Corporación Empresarial, CEOSA).

"Esto quiere decir", explicó Arroyo, "que la cúpula que inició su andadura en la anterior legislatura continúa por coherencia y su continuidad de proyecto y porque es una cúpula relativamente joven, sobre todo en la Corporación Empresarial, en la Fundación ONCE y en la Dirección General, los tres responsables de las áreas ejecutivas van a continuar con su labor".

Aregó que "la nueva legislatura se inició el pasado día 17 de diciembre y tenemos algunos retos importantes, como son el compromiso de crear 5.000 puestos de trabajo a través de la Fundación ONCE a lo largo de los próximos cuatro años. Nos gustaría que hubiese colaboración con las diferentes administraciones públicas y la iniciativa privada".

Otros retos que destacó el presidente del Consejo General de la ONCE son la puesta a punto de nuevas tecnologías para su utilización por los ciegos y la potenciacón de los Servicios Sociales de la organización para que la integración social de los discapacitados sea una realidad más auténtica.

Asimismo, el Consejo ha aprobado el nombramiento de María del Carmen Antonaya como secretaria general adjunta, de Emiliano Martín García como vicepresidente segundo ejecutivo de la Corporación Empresarial y de los dos vicepresidentes del Consejo y del director general como vocales del Consejo de Administración de CEOSA.

El Consejo ha decidido la nominación de José Mría Arroyo, que también es presidente del Consejo General y de CEOSA, como presidente del Patronato de la Fundación ONCE, y del vicepresidente segundo del Consejo General, Rafael de Lorenzo, como vicepresidente ejecutivo de la Fundación. Ambos altos cargos lo habían sido también en la anterior legislatura.