A juicio del Consejo Mundial de Iglesias, "es casi seguro que agravará las tensiones y complicará los esfuerzos internacionales que intentan cesar el fuego y resolver el conflicto".

La carta del CMI, firmada por Konrad Raiser, secretario general de esta organización, apunta lahistoria de las relaciones entre Francia y Ruanda y la percepción del papel de Francia en el país. La presencia militar de Francia, para el CMI, podría ser muy comprometedora para la misión de Asistencia a Ruanda de las Naciones Unidas.

Añaden también que de la manera que están transcurriendo los hechos sería mejor "los esfuerzos humanitarios para ayudar a las víctimas de esta guerra fraticida".

El Consejo Mundial de Iglesias también ha hecho un llamamiento al secretario general de Naciones Unida, Butros Gali, para que mantenga el principio de neutralidad de Naciones Unidas, manteniendo sus fuerzas de paz.