Este Consejo, que está constituido por personas y entidades de las tres diócesis madrileñas "interesadas en una educación de calidad y de inspiración cristiana", informa y asesora a los obispos y sus respectivos consejos en lo concerniente a la educación.

Este organismo subraya en una nota que la LOE "adolece del suficiente consenso social y político y que difícilmente puede afrontar los serios problemas que tiene la educación en nuestro país".

"La politización de la educación está llevando a un recorte de las libertades educativas hasta el punto de no dejar suficientemente garantizada la libertad de enseñanza y el derecho de los padres a elegir el centro en el que confiar la corresponsabilidad de la educación de sus hijos", añade.

El Consejo Interdiocesano opina que "la falta de calidad de nuestro sistema educativo, puesta de manifiesto por informes internacionales, difícilmente se puede mejorar con la vuelta a propuestas anteriores (LOGSE) que han fracasado. En este sentido, detectamos una seria limitación de la autonomía organizativa y pedagógica de los centros".

Asimismo, considera que ese proyecto de ley "es poco respetuoso con la voluntad de cerca de un 80% de los padres que, en uso de sus derechos, eligen libremente para sus hijos la asignatura de religión católica, pues resulta evidente la clara intención de prescindir en el currículo de la enseñanza religiosa escolar".

"El poco aprecio que este proyecto de ley muestra por la asignatura de religión se corrobora con el cambio del estatuto laboral de sus profesores, lo que supone todo un retroceso respecto a la situación actual", concluye.