En su comparecencia ante la Comisión Mixta de la UE, el secretario de Estado señaló que en la reunión que tendrán mañana y el jueves en Bruselas los jefes de Estado y de Gobierno de la UE se trabajará para adoptar medidas a corto y largo plazo para paliar la crisis.

Entre estas medidas, está la flexibilización en las ayudas del Estado y lo relativo a pacto de estabilidad, mayor transparencia en los mercados derivados de crédito, elaborar reglas europeas sobre los depósitos para proteger a los ahorradores, insistir en la necesidad de mejorar de las normas contables, entre otros.

La crisis financiera, indicó, se originó en Estados Unidos pero se extendió por el resto del mundo como "una bomba de racimo" de ahí que ahora la respuesta deba ser conjunta en el seno de la Unión Europea y con el apoyo de EEUU.

En cuanto a las actuaciones nacionales, López Garrido señaló que España responde ante la crisis "con arreglo a la ortodoxia europea y a tiempo, en la convivencia filosófica de la Unión Europea".

Mientras algunos países reaccionaban "individualmente" y con medidas "no suficientemente coordinadas", España esperó y no tomó medidas antes de las reuniones europeas y esperó de tal modo que su "acción se sitúa en el interior de una estrategia europea", añadió.

En la reunión, también se analizará el informe de la Presidencia sobre la volatilidad del precio del petróleo, así como de las medidas que se van a adoptar para conseguir que el Tratado de Lisboa salga adelante con el apoyo de todos tras inicial negativa a su ratificación por parte de Irlanda.