Amarillo animó a los empresarios del porcino ibérico a asociarse y hacerse fuertes, tras el acuerdo definitivo adoptado ayer por el Comité Veterinario Permanente de la UE de declarar a Extremadura zona libre de peste porcina africana y posibilitar el movimiento de animales vivos y carnes frescas.

Las consecuencias de la liberación de estas restriciones serán, en opinión del consejero, una progresiva recuperación de los precios y una importante expansión del mercado para un sector que actualmente factura al año del orden de 50.000 millones de pesetas.

La decisión adoptada ayer por las autoridades veterinarias europeas "culmina el trabajo de muchos años", dijo Amarillo, quien agregó que es el momento de reflexionar. Además, Amarillo no escatimó palabras de agradecimiento para todas las personas del sector implicadas en este proceso.

El titlar de Agricultura y Comercio tuvo en primer lugar palabras de elogio y agradecimiento hacia los criadores extremeños de ganado porcino, quienes, según señaló, "han sabido asumir una muy dura disciplina de sacrificios".

Amarillo elogió también la labor desempeñada durante los últimos años por los equipos de veterinarios de su departamento, cuyos componentes han merecido las felicitaciones de los responsables del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y de las autoridades de la UE.

"Hace ños se decía que esta era una guerra perdida, pero la experiencia nos ha demostrado que si las medidas se adoptan en profundidad y se llevan a cabo con perseverancia, el problema puede llegar a erradicarse totalmente", afirmó.

Por último, señaló que a partir de ahora la ganadería extensiva vivirá del porcino ibérico, después de superarse serios problemas como el desbloqueo de la exportación de embutidos hacia el riguroso mercado estadounidense y la definitiva libre circulación de animales vivos y carn fresca.

"No vamos a bajar la guardia en los niveles sanitarios, hay que alcanzarlos, y una vez lograda esa circunstancia es necesario mantenerlos", afirmó.