Este proyecto, diseñado para proteger la población de galápagos europeos de la Comunidad Valenciana, así como para recuperar y reintegrar en el medio a aquelos ejemplares nacidos en cautividad, ha contado con un presupuesto de cinco millones de pesetas.

Para realizar la reserva, en la que se han soltado un total de 13 ejemplares de galápago europeo, la Consejería de Medio Ambiente ha habilitado 0,2 hectáreas con playas e islas sembradas de sauces, chopos, lirios y juncos.

El galápago europeo, junto con el leproso, es una de las dos especies de tortuga de agua que habitan en la Comunidad Valenciana. Sin embargo, ambas especies viven en medios diferents: mientras el europeo es propio de los humedales costeros, el leproso habita en lugares como barrancos y pequeños ríos interiores.