La joven, de 26 años, fue hallada muerta por su madre en el domicilio familiar con signos de violencia. Junto al cuerpo de la chica se encontraba un peso de baño que presentaba una gran abolladura y un radiocasete con el que también pudo ser golpeada.

La policía también encontró varios efectos personales del hermano, como sus gafas, el reloj y una cadena. Fuentes de la inestigación apuntaron que Salvador C.M., de 18 años, pudo intentar abusar sexualmente de la hermana.

Pocas horas después de que fuera hallado sin vida el cuerpo de María Dolores C.M., la Guardia Civil encontró el cadáver del hermano, en el paraje conocido como Cabezo de la Plata, donde falleció al despeñarse desde unos veinte metros de altura.

La madre declaró que la familia celebró la Nochebuena en un ambiente completamente normal, propio de las fechas navideñas, hasta que, hacia las tres de la mdrugada, encontró a su hija muerta.

Los vecinos y amigos de la famila no comprenden lo ocurrido, ya que insisten en que el carácter y comportamiento de Salvador era el de "un chico normal".