La declaración señala que, con el propósito de hacer del siglo XXI el siglo de los derechos humans, el Congreso de los Diputados se compromete a desarrollar su actividad teniendo presentes los derechos inherentes a las personas, indistintamente de su raza.

Asimismo, se compromete a promover en el ámbito de su actuación una cultura basada en la tolerancia, a incentivar planes de igualdad y contra la discriminación y a luchar contra contra la exclusión social y la marginación.

Además, el Congreso insta al Gobierno a que desempeñe un papel activo en la Conferencia Mundial contra el Racismo, la iscriminación Racial, la Xenofobia y las Formas Conexas de Intolerancia, que se celebrará en Durban (Sudáfrica) del 31 de agosto al 7 de septiembre próximos.

Según explica la declaración, la Cámara estima de la mayor importancia que los documentos finales que se adopten en la Conferencia Mundial incluyan compromisos firmes de los estados y de la comunidad internacional y medidas efectivas para hacer frente, en el presente y en el futuro, a los fenómenos racistas, discriminatorios, xenófobos y de intolrancia, allá donde puedan producirse.