La propuesta contempla la coordinación de las distintas administraciones para controlar este patrimonio, la elaboración de cartas arqueológicas submarinas del litoral, la definición de las fases de prospección, excavación y conservación, el incremento de los recursos humanos y materiales dedicados a estas tareas y la habilitación de barcos de investigación para trabajar en ellas.

Estas iniciatias se unirían a las que se vienen desarrollando en los últimos años, en los que se han realizado inventarios de naufragios, se han registrado yacimientos y han sido utilizados buques oceanográficos con sistemas de teledetección y vehículos submarinos tripulados, como el "Hespérides" o el "Mar Rojo".

El diputado popular encargado de defender la propuesta, José Ignacio Echániz, afirmó que "el extenso litoral, la tradición marítima y naval, los naufragios y las batallas libradas en sus costas, hacen de Epaña un lugar especialmente importante en yacimientos submarinos", por lo que manifestó la necesidad de seguir las recomendaciones de la Unesco de conservar y proteger este patrimonio.

"Los avances tecnológicos para la exploración de los fondos marinos están siendo también utilizados por los llamados 'piratas arqueológicos', que cuentan con recursos económicos y equipos electrónicos de detección y rastreo que están produciendo destrozos y saqueos de los vestigios históricos de nuestras costas", advirtó.