Actualmente, en Albacete sólo permanece una de las hijas del matrimonio Evangelista. El pasado día 16, Evangelista declaró que María Angels estaba enterrada en el chalé que su "madrna", María Puche, tiene en esta provincia.

El supuesto confidente devolvió una de las furgonetas en la capital manchega, mientras que la otra apareció en la localidad catalana de Martorell, una vez que la empresa de alquiler propietaria de la misma denunció su desaparición a la Policía.

Evangelista, que avisó del lugar donde se encontraba la furgoneta al día siguiente, tampoco ha pagado el alquiler de los vehículos.

La Guardia Civil, que hizo una inspección ocular del chalé donde supuestamene estaba enterrada la farmaceútica, ha visitado varias veces el domicilio de Evangelista en Albacete.

Evangelista, que se autodenomina asimismo "agente comercial", cerró también una tienda de teléfonos móviles que tenía en Albacete en octubre de 1993, días antes de acusar a Bassa y Casals de ser los secuestradores de la farmaceútica.

La última vez que el supuesto confidente apareció públicamente ocurrió el día 19 de marzo cuando grabó en Tele 5 un programa todavía sin emitir de "La Máquina de la erdad". Todo apunta a que Evangeslita podría estar en París. El propio delator dijo al comienzo de esta extraña historia que "el revuelo organizado en esta caso le iba a impedir encontrar nuevo trabajo".