Sin embargo, las Cámaras destacan que la evolución del primer trimestre es ligeramente mejor a la registrada en periodos anteriores, cuando el retroceso medio superó los 6 puntos.

Por índices, el de situación actual marca un nuevo mínimo de la serie, al situarse en -35,1 puntos. Sin embargo, el de expectativas registra una leve mejora, aunque se mantiene en niveles negativos, al pasar de -24,7 puntos, que eran las perspectivas para el primer trimestre de 2009, a -20,1 en el segundo.

El empeoramiento que experimenta la confianza de las empresas en abril se debe principalmente a los indicadores de cifra de negocio e inversión, ya que el indicador de empleo se mantiene estable, aunque todavía en negativo.

Por otro lado, la coyuntura económica lleva a las empresas a reducir sus partidas destinadas a inversión, ya que la incertidumbre existente en este momento pone en duda la viabilidad de los proyectos.

Por su parte, la debilidad de la demanda continúa siendo el factor que en mayor medida limita la actividad de las empresas. Asimismo, aumenta el porcentaje de compañías con dificultades de financiación, que pasa a ser el segundo problema más importante para las empresas.