Según los datos del Instituto de Crédito Oficial (ICO) presentados hoy por el presidente de este organismo, Aurelio Martínez, en el mes agosto aumentó la confianza debido principalmente a la mejora del indicador parcial de expectativas, que registró un incremento de 9,4 puntos. Por su parte, el indicador parcial de situación actual repuntó 0,8 puntos.

En agosto, todos los compenentes de ICC aumentaron, menos la valoración de la situación actual del empleo, que cayó 1,6 puntos. De hecho, los consumidores valoran que en los últimos seis meses "ha empeorado la situación del mercado laboral", con lo que se sitúa en el nivel mínimo desde el incio de la serie histórica, en septiembre de 2004.

Martínez subrayó, como dato llamtivo, que el principal empeoramiento de la confianza se da en el segmento de población más joven (16-24 años), "probablemente debido al empeoramiento del mercado de trabajo".

El ICO atribuye la mejoría de agosto a la caída en el precio del petróleo desde mediados de mes, lo que también podría explicar el notable descenso en las expectativas de inlfación y de subidas de tipos de interés manifestadas este mes.

En este sentido, Martínez destacó que, entre los precios del crudo y la confianza de los consumidores, se da una correlación del 89%. Por ello, "si se sigue desacelerando el precio del petróleo en los próximos días, cabe la posibilidad de que, en septiembre, la confianza aumente", dada "la alta dependencia de la economía española del petróleo".

La correlación entre la evolución del PIB y la confianza de los consumidores es aún mayor, ya que asciende al 94%.

OPTIMISMO EN VACACIONES

Otro de los factores que, según Martínez, es "razonable" pensar que haya influido en el repunte de la confianza, es "el relax de las vacaciones", que mueve al "optimismo".

Por otro lado, Martínez destacó que, en los datos de agosto, se aprecia un máximo histórico en el diferencial entre expectativas de futuro y la evaluación que se hace de la situación económica actual. Es decir, "se percibe como mucho peor el presente que el futuro".

Igualmente, se produce un máximo de 45 puntos entre cómo se contempla la situación que atraviesa el propio hogar y la de la economía española en general, que se percibe como mucho peor.

En terminos interanuales, el Índice continúa registrando caídas y sigue anticipando una moderación del consumo privado para los próximos trimestres. Respecto a agosto de 2007 el indicador ha caído 35,1 puntos.

Por ello, a pesar de esta remontada, "se esperan desaceleraciones en los próximos trimestres, a una tasa más suave, tanto en el PIB como en la confianza. Aún no se ha tocado fondo", dijo el presidente del ICO.