"No hemos puesto ningún límite y los inmigrantes creen que si España hizo un primer proceso de regulación y después un segundo, por qué no iba a hacer el día de mañana un tercero. Por eso vienen cada vez más con intención de quedarse aquí, en espera de una nueva normalización laboral: ese es el 'efecto llamada'", explicó Zamorano a Servimedia.

"Esto se nos va a ir de las manos", advirtió el portavoz de la CEP, "porque no tenemos una buena ley que impida la entrada de inmigrantes sin un contrato de trabajo y que dé a la Policía las capacidades necesarias" para tramitar deportaciones.

Según Zamorano, "policialmente se hará todo lo posible para el cumplimiento de la ley, pero no contamos con ninguna ventaja porque nuestro trabajo se ha tirado a la basura", denunció el dirigente de la CEP, en referencia a la eliminación de expedientes policiales de expulsión en virtud de la normalización laboral de los expedientados.

"Los que vienen en patera no son el gran problema, aunque son los que más se ven. El mayor número de inmigrantes ilegales nos llegan por avión y en autocares por las fronteras y, según nuestros datos, pese a lo que digan las autoridades, está entrando y ha entrado últimamente muchísima más gente" concluyó Zamorano.