Hasta ahora, conducir sin haber obtenido el permiso necesario sólo conllevaba una sanción administrativa. A partir de mañana se castigará con pena de prisión de 3 a 6 meses o con multa de 12 a 24 meses y trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días.

Estas penas también se aplicarán al conductor que haya sido privado del permiso por pérdida total de los puntos asignados legalmente o por decisión judicial y siga conduciendo.

La DGT ha realizado una campaña informativa específica para informar, mediante carta, a los aproximadamente 25.000 infractores que fueron expedientados administrativamente en 2007 por conducir sin haber obtenido nunca el permiso de conducir necesario.