La resolución judicial condena al secretario eclesiástico al pago de de una multa de 100.000 pesetas, con la quetendrá que indemnizar a la joven por una falta de vejaciones injustas.

Asimismo, considera probado que Manuel Spínola intentó tocarle el pecho a la joven y llegó a tocarle el trasero, además de contarle obscenidades.

El secretario eclesiástico comentó a la joven que se masturbaba viendo películas eróticas y le pidió que buscara a una amiga porque a él no le gustaban las prostitutas.

Sin embargo, el texto judicial recoge que no se llegó a producir la agresión sexual, pese a la denuncia presenada por la joven, que aseguraba que había sido objeto de abusos deshonestos.

Refleja que hubo una coacción verbal sin intimidación, que atentó contra la libertad sexual de la joven, que cuando ocurrieron los hechos prestaba declaración ante el Tribunal Eclesiástico de Sevilla para tramitar su separación.

El juez que ha dictado la sentencia resaltó que el Código Penal no castiga adecuadamente "conductas repelentes" como la protagonizada por el secretario del Tribunal Eclesiástico.

El magistrao ha pedido al fiscal que investigue las razones por las que el tribunal ha paralizado la tramitación de la nulidad matrimonial solicitada por la joven denunciante.