En una sentncia hecha pública hoy, el tribunal impone una pena de 76 años de prisión a Ramón Piñeiro Veiro, Francisco Javier Filgueira Domínguez y Josefa Rodríguez Porca, como autores de sendos delitos de pertenencia a banda armada, utilización ilegítima de vehículo de motor, detención ilegal, atentado con resultado de muerte, asesinato frustrado y tenencia ilícita de armas y explosivos. Además, considera culpable a Josefa Rodríguez de otro delito de falsificación de documento de identidad.

A Juan Carlos Deibe Vrela le impone una condena de 72 años de cárcel; a Alessandra Queiros Vaz Pinheiro, una pena de 56 años de prisión, y a Manuel Souto Vidal y Eduardo Abado Lojo, de 18 años, mientras que condena a 8 años de prisión a Basilio Fernández Mata y Jesús Manuel Irago Pereira como autores de un delito de colaboración con banda armada. Por el contrario, absuelve de este delito a Manuela Vázquez Cernadas.

De acuerdo con el fallo, los procesados pretendieron apoderarse de las armas reglamentarias, uniformes y matrial de una patrulla de la Guardia Civil que vigilaba la zona de Irojoa (La Coruña), para lo que alquilaron un vehículo, robaron el arma reglamentaria a un vigilante jurado y, en la madrugada del 2 de febrero de 1989, simularon un accidente.

Avisados por los terroristas, los guardias civiles Benedicto García Ruzo y Antonio Pérez Freire se dirigieron al lugar indicado, donde encontraron a Piñeiro Beiro tendido en el suelo simulando estar herido y a Josefa Rodríguez Y Francisco Javier Filgueira que fingan atenderle.

Cuando los guardias descendieron del vehículo y se aproximaron a prestar ayuda, Quintans disparó contra Antonio Pérez Freire, quien resultó herido, mientras que los otros procesados se apoderaron del arma del otro miembro de la Benemérita, al que dispararon con ella, matándole.