En esas manifestaciones, Xirinacs se declaró "amigo de ETA y de Herri Batasuna", señaló que "ETA, como está en guerra, mata, pero no arranca uñas" y añadió también que "ETA mata, pero no tortura. En cambio Lasa y Zabala, murieron torturados", entre otras frases.

Para los magistrados de la Audiencia Nacional, las declaraciones de Xirinacs constituyen un delito de enaltecimiento de conductas terroristas, por lo que le condena a dos años de privació de libertad y a cuatro de inhabilitación absoluta.

Xirinacs fue un activista antifranquista en los últimos años de la dictadura y senador en la Legislatura Constituyente, entre 1977 y 1978, elegido por la circunscripción de Barcelona en una candidatura independiente.