El fiscal había pedido un total de 27 años de cárcel para este matrimonio de Vilagarcía de Arousa, 15 para el padre y 12 para la madre.

Durante la vista, celebrada en la Audiencia Provincial de Pontevedra el pasado día 13, el acusado negó que hubiera golpeado brutalmente a su hija, como denunció el fiscal, y dijo que los hematomas y fracturas por los que precisó atención hospitalaria se los produjo la pequeña al caerse de sus brazos un día que etaba bajo los efectos de las drogas. Por su parte, Ana Isabel Campos negó en todo momento tener constancia de que la niña estuviera siendo maltratada por su padre.

Según los peritos que atendieron a la pequeña en agosto del año pasado, en el Hospital Xeral de Vigo, las lesiones tuvieron que ser consecuencia de malos tratos.

La niña ingresó en estado de coma en el Hospital Provincial de Pontevedra, centro desde el que fue trasladada a Vigo a causa de la gravedad de su estado: tenía un traumatismo raneal que hacía temer por su vida, así como fracturas en dos costillas y húmero. También se le apreció una quemadura, presuntamente producida por un cigarrillo, en una ingle.

Los médicos que atendieron a la pequeña Ana tuvieron que extirparle un riñón y una moneda de cinco pesetas que tenía alojada en el esófago. La niña está actualmente bajo tutela pública y sufre retraso en el aprendizaje del lenguaje y funciones motoras.