Los magistrados han declarado a Joaquín R.R. autor de dos delitos de atentado contra la autoridad, castigado con 3 años de prisión por cada uno, y de otros dos de homicidio frustrado, castigados con otros ocho años de privación de libertad.

La sala ha estimado la concurrencia de una eximente completa de enajenación mental por toxicomanía, oligrofenia y un cociente intelectual bajo.

Junto a esta circunstancia el tribunal ha tenido en cuenta como agravante la reincidencia del procesado. Este tendrá que indemnizar con 15 millones de pesetas a uno de los dos guardias civiles que, como consecuencia de dos impactos de bala, presenta como secuelas desviación del tabique nasal, pérdida de la potencia sexual, dolores en una pierna y varias cicatrices en el tórax.

En el juicio celebrado en la Audiencia granadina, el fiscal pidió para el acusado condenas que sumaban más de 72 años de cárcel, ya que calificaba los hchos de asesinato frustrado, en vez de homicidio frustrado.