El juez de vigilancia penitenciaria decidió esta semana denegar al ex banquero el tercer grado penitenciario por considerarlo "precipitado e improcedente", dando así la razón al fiscal jefe de la Fiscalía de Madrid, Mariano Fernández Bermejo, quien había recurrido la decisión de Instituciones Penitenciarias, que le concedió este grado cuando Conde sólo había cumplido cinco meses y diez días de su condena.

García-Pablos explicó que el recurso contra el auto revocador seguirá "susancialmente" la misma línea que las alegaciones presentadas contra el que presentó el fiscal para convencer al magistrado de que suspendiera el beneficio penitenciario concedido al ex banquero.

Así, García-Pablos argumentará que la concesión del tercer grado a Mario Conde se ajusta a todos los requisistos que exige la ley y que las razones esgrimidas por el magistrado para revocar la decisión de Instituciones Penitenciarias para con su cliente no rebaten la legalidad del acto administrativo, si bien sn "formalmente correctas".

Además, García-Pablos recordará que la ley no establece un tiempo mínimo para la concesión del tercer grado penitencario y argumentará que el hecho de tener una causa pendiente, el "caso Banesto", no tiene por qué incidir negativamente la situación penitenciara de su cliente, quien aún no ha sido sentenciado por ese procedimiento.

El letrado recordó que a la hora de evaluar si un medida ha sido legal o no hay que analizar si se tomó conforme a los requisitos que establee la ley. En este sentido, señaló que el auto del juez ha tenido en cuenta otro tipo de consideraciones.

El abogado de García-Pablos declaró a esta agencia que no cree que el juez de vigilancia penitenciaria "vaya a cambiar de opinión en tres días", por lo que espera que reafirme su decisión, tras lo cual, el letrado de Conde recurrirá ante la Audiencia Provincial de Madrid.