El aparato supersónico sldrá del aereopuerto parisino de Charles de Gaulle con destino a una base de la fuerza aérea situada en Istres, cerca de Marsella. En el avión sólo viajarán miembros de la tripulación, según informó BBC News.

Una vez en la base aérea, el aparato será sometido a rigurosas pruebas, entre las que se incluyen simulaciones de pérdida de combustible en una de las alas del avión.

Se espera que un Concorde de la compañía británica British Airways pueda realizar vuelos de prueba en unas ocho o diez semana, lo que permitiría reanudar los servicios franceses y británicos para la próxima primavera.

El 25 de julio del pasado año, un Concorde de la compañía Air France se estrelló envuelto en llamas en la ciudad de Gonesse, al norte de París, falleciendo los cien pasajeros que transportaba y los nueve miembros de la tripulación, además de cuatro personas que se encontraban en tierra.

La causa pudo ser una pieza de metal que se encontraba en la pista de despegue y que provocó un reventón en una de las redas del avión. Trozos de neumático hicieron que explotara el depósito de combustible del Concorde. Sin embargo, todavía no está claro cómo la aereonave pudo perder tanto combustible en tan poco tiempo.