Hasta el momento, en concepto de daños materiales, el Interior ha abonado 2.870.820 euros como consecuencia del atentado, en el que murió el subinspector del Grupo Especial de Operaciones (GEO) del Cuerpo Nacional de Policía Francisco Javier Torronteras y varios agentes resultaron heridos cuando se disponían a detener a los presuntos terroristas islamistas.

El presupuesto inicial de la obra fue de 2.240.000 euros, de los cuales la parte que no cubran los seguros y que será abonada por el Consorcio de Compensación de Seguros, ha sido asumida por el Ministerio del Interior.

Tras producirse el atentado, el Ministerio encargó un estudio técnico y otro económico sobre las distintas alternativas de reconstrucción del edificio y su coste. Analizados estos estudios, se decidió optar por la demolición del edificio sobre rasante para proceder a la reconstrucción del mismo, por entender que la medida adoptada es la que mayores garantías de seguridad ofrecía para los vecinos del edificio.

Las obras, que se han desarrollado durante diez meses, han concluido dentro de los plazos previstos inicialmente.

GASTOS DE REALOJO

Además, el Ministerio del Interior habilitó en un primer momento una ayuda extraordinaria de 3.000 euros para cada familia para hacer frente a los primeros gastos ocasionados por el realojo.

Tras la explosión, los vecinos fueron realojados primero en un hotel y más tarde en viviendas de alquiler en las que continuarán hasta que se les entreguen sus viviendas. De los gastos derivados por este alojamiento provisional también se ha hecho cargo el Ministerio del Interior, que ha abonado por este concepto 293.430 euros.

A esta ayuda, se une una partida habilitada para afrontar los gastos derivados del alta de los vecinos en los servicios telefónicos, eléctricos y similares en el momento en que regresen a sus viviendas. Por otro lado, Interior ya ha abonado 86.370 euros en concepto de indemnizaciones por daños a vehículos y viviendas circundantes afectadas por la onda expansiva.