A juicio de Llamazares, la decisión del Ejecutivo central "vulnera la Constitución" y por ello requiere una respuesta ante los tribunales.

Sin embargo, reconoció que las vías para poder presentar el recurso de inconstitucionalidad son muy complicadas, ya que su grupo no cuenta en el Congreso con el número mínimo de diputados (50) que le permitiríaacudir al Alto Tribunal.

Asimismo, dijo que "es complicado también articular una iniciativa de estas características desde los parlamentos autonómicos, y es complicado que el Defensor del Pueblo sea quien recurra esta medida ante el Tribunal Constitucional". Ante estas dificultades, IU estudiará la posibilidad de utilizar otras vías, aunque por el momento los dirigentes de la coalición no saben cuáles pueden ser.

Llamazares aseguró entender la respuesta del Gobierno vasco "ante la gravísima imposción del Concierto Vasco por parte del Gobierno central".

A su juicio, la política practicada por el PP en el País Vasco está basada en la confrontación y lo único que persigue es el deterioro de las instituciones, lo que ha provocado que las relaciones entre las comunidades autónomas y el Estado atraviesen en la actualidad su situación más crítica desde la Transición. "Se lo debemos a la propuesta unitarista e impositiva y a la relectura centralista de la Constitución que ha hecho el PP", afirmó.

Llamazares instó tanto al Gobierno central como al vasco a recuperar el diálogo y retomar la negociación del Concierto en el plazo más breve posible.