Según explicó el concejal, el objetivo es hacer ver de forma gráfica a los talaveranos las molestias que provoca la basura abandonada en las calles y conseguir que cooperen con el servicio municipal de limpieza.

La campaña, según Casañeda, se iniciará con toda probabilidad en marzo, mes en el que comienza la primavera y la gente pasa más tiempo en la calle.

Esta iniciativa será aplicada por los trabajadores del servicio de recogida de basuras del Ayuntamiento de Talavera, que en lugar de vaciar las bolsas de desperdicios en los camiones, las vaciarán en las aceras.

Además, el concejal de Sanidad y Medio Ambiente tiene la intención de trasladar la basura del vertedero municipal a una céntrica zona de la ciudad, con el fin de ausar el mismo efecto impactante entre los vecinos.

Para Castañeda, la cantidad que el Ayuntamiento gasta anualmente en la limpieza de la localidad, cerca de 240 millones de pesetas, podría destinarla a obras de infraestructura en la ciudad.