En nota de prensa, Concapa aseguró hoy que los impresos de matrícula para el próximo curso no permiten a las familias especificar la lengua en la que desean educar a sus hijos, desobedeciendo la sentencia del Tribunal Supremo.

Esta sentencia obliga a incluir dos casillas en los impresos, una para el catalán y otra para el castellano, de forma que los padres puedan marcar qué lengua vehicular desean para la educación de sus hijos.

En este sentido, Concapa apoya las acciones emprendidas por numerosas familias catalanas frente a esta "nueva imposición" que consideran "propia de un Gobierno totalitario al estilo de las repúblicas bananeras", y "alejada de lo que debe ser un comportamiento democrático basado en el respeto a la ley y a la igualdad de trato para los ciudadanos".

Por eso, la confederación exige al Gobierno central que ejerza sus funciones y utilice los resortes legales disponibles y, en particular, la Alta Inspección Educativa para velar por la garantía de los derechos constitucionales de los ciudadanos.